TEMPLO DE CHAVIN DE HUANTAR

Chavín de Huántar. Imagen: Archivo de Federico Kauffmann.

El templo de Chavín de Huántar

Gracias a los trabajos de John Rowe desde la década de 1960 se sabe que en Chavín de Huántar se construyeron dos centros ceremoniales: el más antiguo es denominado Templo Viejo de Chavín y fue erigido desde el siglo XIII a.C. cubriendo una wanka o piedra sagrada conocida como “Lanzón Monolítico”. El templo es una pirámide escalonada con estructuras laterales a manera de brazos que cubren una plaza circular hundida donde según el arqueólogo Luis G. Lumbreras se ubicaba el famoso “Obelisco Tello”.

Atrio y plaza circular del Templo Viejo de Chavín. Imagen: Archivo Luis G. Lumbreras.

El Templo Nuevo de Chavín es llamado también “El Castillo” y tuvo su esplendor en los siglos IV y III a.C. También tiene “forma de U”, pero es más grande que el Templo Viejo, y tiene una plaza cuadrangular hundida de 50 metros de lado. En esta etapa la imagen más adorada fue el “Dios de los Báculos” de la “Estela Raimondi”.

"El Castillo" o Templo Nuevo de Chavín con su plaza cuadrangular. Dibujo: Juan Acevedo.

Ambos templos tuvieron sus fachadas y paredes interiores enlucidas con barro, posiblemente decoradas con imágenes de sus dioses y principales ritos. En sus abundantes galerías interiores se hallaron ductos de ventilación y acueductos subterráneos. También fueron desenterrados muchos objetos de cerámica propia de Chavín y de regiones lejanas como La Libertad y Cajamarca. Asimismo, conchas marinas provenientes de Guayaquil, Ecuador. Esto demuestra que Chavín de Huántar fue un importante lugar de peregrinación e intercambio para muchos pueblos del periodo Formativo Medio.